El sonido del timbre dispara diversas emociones, por un lado el deseo de salir a jugar, comprar golosinas, correr en el patio, saltar a la soga, estudiar lo que va a tomar la maestra en la próxima hora, jugar y jugar !!! por otro lado el respiro necesario para seguir la tarea, un café, un mate, una charla... Vuelve a sonar el timbre, esta vez para volver a clase, quizás empieza la hora preferida... Así como el timbre de los colegios es el trabajo diario, uno propone y las ideas estallan!
lunes, 25 de abril de 2011
la ciudad de buenos aires vista por los chicos de secundaria. mayo 2010
2010 fue el año del bicentenario y trabajamos mucho, en el colegio elegimos conocer a fondo la ciudad de Buenos Aires y así comenzamos en mayo de 2010 recorriendo los barrios, algunos barrios porteños, leyendo poemas, escuchando tangos y milongas, visitando museos y observando todo...
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